Desgarros y palabras:

Vienes prófugo de una obligación que pesa más que tu amor propio,
Que el amor ciego a tu madre,
Que el revés de tus prioridades
Que lo que prometes y se desvanece.

Así vienes a mis brazos,
Presa del espantoso ruido de lo que es mi voz que se queja
Así te vas.

Llueve con ritmo las lágrimas de mi corazón
Que busca entre todos los escombros que dejan los intentos de amor
Y encuentra pendientes: cartas que debí escribir, solicitudes que debí atender, caminos que no tomé.

Llevo en mi pecho encendido más de lo que llevé en mi vientre,
Madurado con dolores y malestares que se compensan,
Mas no la indignación que socava y pesa,
Y no suma sino resta.

Llevo la congoja del no poder hablar a "calzón quitado" por no tirar tu orgullo de cuna
Y manchar así la imagen que te hicieron tus padres.

Nuestros pies descalzos, sufren los cayos que no hay modo que se hagan,
Nuestras espaldas mojadas demandan defensas,
¡Cómo cala el frío y cómo truena el hambre!
El frio de la ausencia y el hambre de la compañía
Que una y otra son contrarios, y sin una y otra son la misma.

Hablo todo el tiempo mi monólogo,
Cruel verso es ese beso que despide una promesa a medias,
Un medio intento
Dos pies fuera y un dedo dentro
Eso es lo que eres
Mas de ellos, menos mio
Todo a ellos, menos conmigo.
Un silencio que aniquila y ni siquiera hay vino
Con quien beber la botella y me alivie con cariño
Que aquí con esta pena recuerdo que hay alguien en el nido
Dejo este disparate, cierro las cortinas, finjamos, que no se entere el vecino.

...Vuelvo con los días...

Donde emerge la inspiración que produce el indignante desprecio
La falta de voluntad
El desperdicio del deseo
La basura de mis letras al iletrado
La cero audiencia para quejarme
El brazo invisible para llorar
El alivio que ya ni en sueños aparece para consolar
La determinación a flor de piel
Siempre yo respirando a través de una bolsa
Deseando más, y más y más.

Y el éxito se retarda,
Los sueños se disolvieron
En una cucharada de leche o de jarabe,
En un trago de saliva amarga que calló un insulto, un basta, un vete, un grito desesperado quizás.

No sirvo para los lamentos,
No ahora que está ella
Monumento de inocencia
La felicidad que representa,
Todo en mi vida
Mi más amado amor,
Lo que me hace levantarme de esta mierda que es pedir y no obtener, más bien hacer y contribuir hasta con el alma.

Aquí voy de nuevo,
Presa de un espantoso tormento
Huyendo de mi peor miedo
Tratando de ser sorda
No queriendo abrir la puerta al fracaso que toca mi puerta,
El fracaso del amor, de las ganas, de los hubiera, de los sueños
El fracaso que la exceptúa a ella.

Pienso y re pienso publicar estas mierdas
Estas líneas
Este artista fracasado y arruinado
Que habla con determinación
Que lucha y ama con devoción
Y con fervor sufre
Que con fiebre ardiente defiende su postura
Que pelea con su andrajosa armadura
Que no vacila
Que da la cara
Que no se humilla y no se halaga
Lo que soy
Lo que compongo
Mi confesión desesperada
Mi voz.